Más de 104 Años de Fe y Comunidad

La Iglesia de Dios Pentecostal MI Espino en Arecibo, Puerto Rico, es un brillante testimonio de fe y dedicación que se remonta a 1920, en el barrio Miraflores, sector Espino. Todo comenzó con la apasionada Hna. Dolores “Lolita” Estrella, quien predicaba de casa en casa desde 1918. Su incansable labor culminó en 1924 cuando la iglesia fue formalmente organizada, con Lolita como su primera pastora.

Con el paso de los años, la iglesia ha sido testigo de la dedicación de muchos líderes. En 1970, el Hno. Benjamín Santiago se convirtió en pastor y reconstruyó el templo de madera y zinc, sentando bases sólidas. En 1975, el Pastor Jacob Pérez llevó la iglesia a una nueva fase de expansión, adquiriendo más terreno y construyendo un templo de cemento techado en galvalume, junto con una casa pastoral.

El Pastor Rosario Pabón llegó en 1982, y a finales de ese año, el Pastor Jacob Pérez regresó de su misión en Venezuela. Bajo su liderazgo, el templo duplicó su tamaño y se construyó un salón de actividades y un área para la Escuela Bíblica. En 1988, con la llegada del Pastor Gilberto Rosado, se lideraron mejoras significativas en la infraestructura y la construcción de seis nuevos salones de Escuela Bíblica.

En 2013, el Pastor Ángel Centeno asumió el liderazgo, continuando con renovaciones y expansiones que llevaron a la iglesia a nuevas alturas. Bajo su guía, se realizaron mejoras en oficinas, altar, baños, área de primeros auxilios, estacionamiento, e instalación de tecnología avanzada, reflejando el crecimiento continuo de la congregación.

Hoy, con 104 años de historia, la Iglesia de Dios Pentecostal MI Espino sigue creciendo y siendo un faro de fe y comunidad en Arecibo, celebrando su rica herencia y mirando con esperanza hacia el futuro.